Miedo y vanidad; vanidad y miedo. Y una huida
constante, ansiando desesperadamente tu cuidado y tu contento, del sufrimiento
originado precisamente por la vanidad y el miedo.
No te digo esto para que cambies, no pretendo que
tú ni nada cambie, sino para que te observes. Como quien se mira en un
espejo.
Y al observarte, te aceptes a ti mismo y, a
partir de ahí, a los demás y cuanto te rodea. Y al aceptar, ames. Y al amar, te
sientas Amado por la Vida y la Creación. Y al sentirte Amado, te rindas.
¡Ríndete!. Total y definitivamente. Comprobarás
entonces y sólo entonces que la Rendición no es fruto de la impotencia, sino del
empoderamiento; que no es efecto de tu pequeñez, sino del endiosamiento que
florece al constatar que Dios es yo y yo soy Dios cuando todo cesa y dejo de
identificarme con cualquier tipo de identidad, sea física o espiritual, sea
individual o colectiva.
Con la Rendición explosionará en ti, de manera
natural y sencilla, una Nueva Vida que no puede ser pensada, ni conceptualizada
ni predefinida. En ella luce exclusivamente la Bandera Blanca de la Rendición
plena.
Para que ondee y se despliegue en su colosal
dimensión y hermosura, insuflará la Bandera Blanca una Libertad radical y
completa que emanará de tu interior como espléndida y sutil brisa de Amor.
Es una brisa suave, sí, pero implacable. Te
despojará de cuanto has sido, tenido, anhelado y temido; te impulsará al
abandono y al desalojo hasta vaciarte de toda vanidad, en cualquiera de sus
manifestaciones; y, finalmente, te llevará a donde le dé la gana.
Y tú no tendrás miedo. Vacío y sin nada ni
necesidad de nada, te dejarás llevar, fluirás y no tendrás miedo. Nunca
jamás.
La Confianza habrá anclado para siempre en tu
Corazón y tú ya no serás tú: sabrás bien lo que supone “Nacer de Nuevo” y te
habrás transformado en el Viento que todo mece, todo acuna y todo Ama, pues es
el Amor mismo y puro.
¿Qué es tu vida?
La respuesta, como intuyó Dylan, está flotando en
el Viento. Y el Viento es Tú, que eres Yo como Yo Soy Tú.
Es decir, Amor-
Emilio Carrillo
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